Resumen
Durante el siglo XVIII, el arte de la platería alcanzó en Puebla de los Ángeles, segundo centro artístico de la Nueva España, un desarrollo extraordinario y una identidad específicamente poblana. A pesar de las dificultades que comporta realizar un estudio de conjunto por la gran dispersión y el limitado número de piezas localizadas hasta el momento, se trata en este artículo de contribuir a sistematizar, definir y diferenciar sus rasgos formales, técnicos y tipológicos más característicos respecto al resto de la producción novohispana y capitalina en particular, sus recíprocas influencias, así como sus relaciones con otras artes plásticas y aplicadas. Con el fin de ayudar a descubrir e identificar nuevas obras, se analizan el lenguaje decorativo y las tipologías religiosas y civiles más representativas (custodias de astil de figura, cálices, vinajeras, lámparas, arañas, servicio de vajilla y aseo).